sábado, 18 de mayo de 2013

Lullaby #Día4 LET'S CRASH THAT FIESTA! (por la mañana)

-La primera alianza que participara este año es la de nuestra queridísima princesa, más refulgente que el sol, más bella que la más hermosa de las flores... y tan letal como una espada... -Hermes hizo una pausa y un foco apuntó a unos de los lados de escenario donde salió Amaterasu, acompañada por una chica menuda, casi una niña. que no parecía entender del todo donde estaba.- Con su adorable médium  la pequeña Kaya... -El dios hizo un gesto dramático con la mano- ¡Un fuerte aplauso para ellas!


El auditorio rompió en un rugido ensordecedor. Al parecer, Amaterasu y Kaya eran algo así como Idols en Oniria y se las tenía en mucha estima. Además, (Que Alice no me oiga) estaban monisimas, parecían un juego de muñecas japonesas, con vestidos a juego y todo.

-Los próximos son familia mía así que espero que les deis una cálida bienvenida... -Señaló al otro lado del escenario y salieron Poseidón, con la misma pachorra caracteristica de su hijo, acompañado de la chica que había intentado matarme el día anterior.

Cerca suyo estaba un hombre, alto, maduro, bien arreglado y muy serio, con un traje de diplomatico azul, acompañado de un chico... ¿Como describir a Atlas? Ah, sí! Peligroso. Tenía unos veintitres años y vestía una camisa blanca, arremangada y abierta, sus ojos eran plateados y parecían echar chispas, escondidos tras el enmarañado pelo negro.

-¡Mi Padre Zeus, con el joven Atlas, y mi Tío Poseidón, con mi encantadora sobrina, Nerya! ¡Representantes de Requiem Thunder!

El publico volvió a estallar en gritos y yo me di cuenta de que tanto Nerya como Poseidón me miraban de reojo, con algo similar al arrepentimiento. Pero, como bien había dicho Hermes, la ceremonia sería rápida  los lideres de cada equipo se fueron pasando al fondo, para dejar pasar a los siguientes.

-¡Los siguientes son los chicos de Horus!¡Piramidaal Sun!-Desde nuestro lado del escenario, salió un chico de piel bronceada, con los ojos tatuados, acompañado de un hombre con cabeza de halcón, muy robusto.- ¡Su líder es Alzaak, el brujo de los tatuajes!

Pasaron un par de grupos pequeños ates que nosotros, realmente, no creí que fueran a ser mucho problema, y Bell me lo confirmó. Yo no tenía que luchar directamente hasta la ronda eliminatoria, y para entonces, todos aquellos equipos habrían sido destrozados. Hubo un par de tamaño medio que sí que llamaron mi atención, sin embargo, no pude pararme a mirar mucho, porque en seguida Hermes anunció nuestro turno.

-Ahora, damas y caballeros, ha llegado la hora de que rindamos pleitesía a nuestro amado, queridísimo, genialerrimo y bienamado benefactor... El señor de Oniria, el defensor de la paz, el fundador de estas celebraciones -Hizo una pausa dramática-  Caído del cielo para detener el infierno ¡BELPHEGOOOOR SUNDOOOOWN!

Cuando Bell y yo salimos al escenario, el publico pareció enloquecer, como si una super estrella hubiera entrado al escenario, con lluvia de prendas intimas incluida. Bell lucía su mejor sonrisa e intenté hacer lo posible por no parecer muerto de miedo y nervios. Me relajó ver que Alice, Charlie y Vladik estaban en primera fila, animándonos  Cuando llegamos al centro del escenario, Bell tomó el micrófono de Hermes para hacer el mismo las presentaciones.

-Bueno, me alegra ver muchas caras conocidas entre el publico... -Le guiñó un ojo a alguien del público que no logré ver- y otras nuevas... Han sido ¿Cuanto? Unos dos mil años desde la primera Fiesta de Guerra que organicé... -Hizo una pausa y se tiró un mechón rebelde hacia atrás  Me acuerdo que excepto Poseidón y Amaterasu, todos me llamaron loco... Pero, ahora, he conseguido todo un imperio. -Se puso a pasear por el escenario y se paró a mi lado, poniéndome una mano en el hombro- Y ahora lo vuelven a hacer... -Miró sin disimulo a Zeus y Horus- ¿Por qué elegir a un novato? Alguien que ni siquiera sabe empuñar un arma, cuando en Lullaby hay médiums que podrían pasar perfectamente por Quimeras... -Me empecé a sentir un poco humillado ¿a que venía aquello?- Yo os diré por qué... Yo también empecé sin nada! Yo empecé siendo como este chico ahora... Y pienso demostrar, de nuevo, que no es la experiencia ni la destreza lo que nos hace poderosos... ¡Es la fuerza de nuestro corazón! -Levantó mi mano- ¡Luca Serra!¡Quedaos, bien con este nombre, porque es el nombre del ganador de este año!

Antes de que la audiencia volviera a rugir, se oyó un aplauso, lento y sarcástico  desde la parte superior del escenario. Allí como una gárgola, intimidante, se encontraba Styx. con un abrigo un poco menos raído que el que solía llevar y una camisa negra en lugar de su camiseta de esqueleto habitual. Llevaba gargada al hombro a Lisa, que llevaba solo una túnica de seda negra.

-Buen discurso, viejo... -Bajó de un salto al escenario y se encaró con Bell- Estoy deseando ver como se destrozan tus esperanzas... igual que tu destrozaste las mías... -Sin mediar más palabra, Styx se fue a su sitio, pero Lisa se quedó mirando a Belphegor, con odio.

-Bueno... -Hermes intervino en seguida para quitarle tensión al asunto- ¡Ahí están Killer Bones, la Parca, y su medium Arthur D. Stormkind, aunque todos los conocemos mejor como STYX D. REAPER!-Hubo un trémulo aplauso, y pude ver como a la mayoría de los presentes se les encogía el corazón.

Así que el verdadero nombre de Styx era Arthur... ¿De donde me sonaba aquel nombre? Intenté hacer memoria mientras nos poníamos en nuestros respectivos lugares. Entonces, me vino a la cabeza la noche del chico al que Alice había intentado ayudar. ¿Podía ser que fuera ese Arthur? No, Alice había dicho que estaba muy enfermo y que el poder de la pluma de ángel lo había empeorado, sin embargo, quitando su estado mental, Styx parecía más sano que una rosa.

-Y ya, pasamos al último equipo... -A Hermes pareció helarsele la sangre al leer el nombre del equipo en la tarjeta- N-nightcore... El equipo de... -Miró con pavor al hombre que salía desde uno de los lados del escenario, encorvado, con una capa y capucha echada, apoyándose en un chico, moreno y sin expresión en el rostro- Lucifer...

Todos enmudecieron y vieron al hombre encorvado acercarse al centro del escenario. Cuando estuvo a la altura de Hermes, Lucifer se quitó la capa. Llevaba un traje negro, con pinta de ser muy caro, que me recordó a uno de estos que llevaban los "coroneles" del sur, pero del color contrario, incluso llevaba una de esas corbatas de baquero con la hebilla en forma de calavera de cabra. Pero, tanto su rostro como sus manos, y supongo que todo el cuerpo, estaban quemados, aunque parecían casi carbonizados. Sus ojos eran dorados, como los de Belphegor, pero había algo distinto... En lugar de la espiral de luz torva de Bell, los ojos de Lucifer estaban recorridos por una espiral negra, no había luz... era una espiral de odio, muerte, dolor, caos, traición, devastación y venganza... Casi grité de horror al verlo... No soy una persona impresionable, pero... esos ojos, todavía los veo en mis pesadillas, es como tener al Mal mirándote a los ojos.

-Ha pasado mucho tiempo... -se quedó mirando a Bell, con los ojos entornados, y este lo miró con indiferencia- Oh, vamos, no me mires así... ¿Ni siquiera vas a darle un abrazo a tu anciano padre?

-No tengo nada que tratar contigo, Lucifer... -La voz del diablo sonaba mecánica y noté como me escondía tras él con el brazo- Acabemos con esto lo antes posible...

-¿Ni siquiera vas a dejarme hablar con mi nieto? -Me miró, con una chispa de tristeza.

-Ni el es tu nieto, ni yo soy tu hijo... Déjanos en paz, Lucifer... -Los ojos de Bell realmente parecían encendidos de ira- Nunca te dejaré hacer lo que planeas...

Me quedé un poco chocado... Lucifer me acababa de confirmar mis sospechas, pero además me había dicho algo mucho más perturbador. No solo era el hijo de un diablo... sino que además mi abuelo era El Diablo... fue como si me hubieran dado un golpe en la entrepierna con un bate de béisbol. No podía creerme nada de aquello y en cuanto se dio por concluida la presentación, me escabullí, corriendo, hasta el balcón del auditorio. Necesitaba pensar y relajarme. Estaba a un golpe de romperme del todo.

-Luca... -Me giré y vi a Bell, llevaba la chaqueta la mano y tenía los ojos un poco rojos- Siento... que te hayas enterado así...

-¿Por que no me dijiste nada?-yo estaba furioso y lloraba. Cuando lo pienso ahora me doy cuenta de que fui un poco injusto con él. Pero entonces solo era un niño.- ¿Por qué nunca viniste?¿Por qué viniste a mi solo cuando te interesó?

-Luca, por favor, es complicado... -pude ver como el imponente Belphegor, un diablo, tan poderoso, tan valiente... se quebraba por la mera idea de estar haciéndome daño- Yo amaba a tu madre... más de lo que puedas imaginar... Es tan... como ella... -Suspiró y me tendió la mano- Ven y te prometo que te explicaré toda la historia...

Me lo pensé un par de veces, pero el enfado no era más que una rabieta, así que finalmente, tome la mano de Belphegor, de mi padre. Me llevó hasta una sala privada y sirvió un par de cafés.

-Bueno... ¿Por donde empiezo?

-Por el principio.

-Buf... Bueno, si tuviera que empezar esta historia, creo que empezaría hace cuatro mil años... con Gabriel...

3 comentarios:

  1. ¡Styx tiene la voluntad de los D.! xD
    Y bueno, pues las sospechas confirmadas, pero encima Luca tiene a uno de los mejores dioses como abuelo. Yaysh.
    Y ahora a confirmar mi OTRA sospecha, aunque básicamente ya está confirmada.

    ResponderEliminar
  2. LO SABIA. LO SABIA. LO SABIAAAAAAAAAAAA. ¡SIGUE!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ahora es cuando es un malentendido y os jodo a todos (?)

      Eliminar